lunes, 14 de abril de 2014

# Se tu mismo.

Antes sabía escribir. Antes tenía inspiración o una musa que me inspirara, pero ahora, ahora ya no sé escribir. No hay nada ni nadie que me inspire a escribir.

Me encantaría volver a tener esa imaginación que tenía antes. La misma imaginación que me hacía escribir mil y una historias, aunque sólo publicara tres o cuatro.

Ella era mi musa, pero quiso dejar de serlo. Fue la tercera persona que perdí, pero la primera por estúpido y orgulloso. Las otras dos... bueno... fueron causas naturales. Pero ésta, ésta fue por mi culpa, nada más y nada menos. Ella me hacía imaginar esas mil y una historias. Perdón por decir imaginar, quería decir soñar, porque realmente las soñaba mientras dormía y luego las escribía en un papel o simplemente se las contaba, como la historia de nuestra casa... Realmente ella era mi musa.

También me inspiraba escribir sobre el parkour, pero ahora estoy en una etapa rara de mi vida. Estoy entre la espada y la pared por así decirlo, ya que uno de mis principios es no venderme, pero creo que es la única salida que veo para ayudar a mi familia. David Belle dijo: "si alguna vez encontramos un problema, sabemos como utilizarlo. Somos armas ocultas". Ésto me hace pensar que no sería venderme, ya que es un problema, y aún por encima es para ayudar a mi familia, familia que siempre ha estado ahí siempre que lo he necesitado. Entonces... si lo hiciera... no sería un hipócrita, no por completo, ya que estaría rompiendo uno de mis valores por ayudar a quien me ha dado la vida. Está claro que la respuesta está en uno mismo.

He empezado escribiendo de un tema y ha derivado en otro.

Alfonso Fernández Pousada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario